jueves, 30 de junio de 2011

COMPASES DEL AIRE

Cambió los compases del aire
en mi sombra

entre el frío y la luz.

En mi casa
sus pasos 
perduran
ahora,


como ceniza en los techos
y un poco de agua
a los pies
de algún tronco. 

Abro las  cortinas cada amanecer
para imaginar 
que nuestra conversación
comenzará como  la noche anterior


"la vida no fue un rumbo desviado
al desierto, 
ni la muerte es ajena
a la algarabía". 



Acudo a su cuarto
y su risa es un niño que ríe dormido,
que habla y que reza

lo contemplo y
despierta,

enredo en mis dedos  su pelo,
beso su halo,

nada más


que hablar suavemente
en su  mundo de aromas


a fruta de árbol
                         intacto,


retoños jugosos

su cuerpo,  
que una brisa conduce a  llanuras
y enciende
el mohín tedioso de olvido;

en  calles veo sus manos

finos dedos 
que una danza agita,

así,

yo comprendo que puedo soñar
su rumbo conmigo
por rumbos ordinarios

en un mundo que muerde 
sus cálices,

y una flor
     lúcida
que     
        el tiempo
marchitará
                lejos


entibiará
mis últimos lugares.

jueves, 23 de junio de 2011

VOLVERÁS CON UNA ESTRELLA


A tu largo talle que danza,
de la  noche el fuego
así retorno uno y otro instante
candente especia que pica
y grita
en la olorosa mañana
de  tu tibio pecho,
hecha un volcán
regreso,
a tu vello dulce
y parpadeo
mi lengua sorbe
en aguas
sudor claro de salvaje pétalo
entre mis pechos morenos.

Íbamos luciendo joyas de tormentos
en las luminarias del centro,
riendo en la estrella azul,
entre los cuerpos,

llamaba,
no olvidó la estrella callada
que guardé
en un bolsillo
y con tu voz canta
y pinta las calles
de mis ojos.
Cuando vuelvas me dirás
los sonoros signos de tu nombre
mi poco tiempo
que soñé,
tu resistente vuelo
lejos de mi retenido
deseo
en un pasaje secreto.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Finisterra


Amo  tus labios

como un jardín
y botones en flor,

en cada noche oscura de luna
palparé hasta sus centros
buscando las lumbres
de cada uno. 

Que exploten sus sombras
sobre la huella
que mueve mi imagen
celadora,

arribes gallardo acendrando tu viril
cuerno en mis colmenas.

Apóstata,
me querrás,

testaferro de tu nombre,
finisterra,

concha que habita en la roca
y perforas,

finito latido que me da de beber.

Llevo mi cuerpo desnudo
acerca tu vientre a mis selvas,

pubis a pubis
desnudo a desnuda.

martes, 11 de enero de 2011

Vacío


El filo de tu lengua
toca la paz de mis labios,
un trocito crece como un pezón perdido,
hurga entre papiros
la aguda hoja
en mi hondo alvéolo
el escalpelo,
su textura te oprime enceguecido
abismo agudo de tu lengua
¡cómo liba mi pistilo¡
ansioso
colibrí.